¡Aprende a reparar focos ahorradores con simple truco!

¿Sabían que el primer foco de luz creado aún funciona? Le dicen la bombilla centenaria y está ubicada en su lugar inicial, una estación de bomberos en Livermore, California, EE. UU. Esta bombilla creada y donada por la empresa Shelby Electronic es referenciada por Los Récords Guinness y posee su propia página en las redes sociales e incluso es filmada día y noche para monitorear si aún funciona o no y así verificar el tiempo exacto de su récord mundial como el foco de luz que más tiempo lleva encendido en la historia.

¿Por qué se los menciono? Porque quizás no lo habías notado, pero es interesante lo mucho que le importa la luz y los bombillos a la humanidad; podría decirse que es una fijación basada en una enorme necesidad.

Vayamos un poco más allá y formemos parte del proceso: aprendamos a reparar un forro ahorrador.

En realidad, no necesitas mucho conocimiento, solo busca por lo mínimo dos lámparas con las mismas características y comenzamos.

Al abrir la lámpara observarás algo así:

Esta se divide en dos partes, la primera, coloreada en naranja es el área del vacío o de los filamentos, y la segunda, en verde, es la parte de la electrónica. El punto de encuentro son precisamente los filamentos, pues estos comunican el vacío con la tarjeta electrónica, que es el pequeño círculo marrón (que si te fijas cuidadosamente tiene pequeños filamentos, al igual que el vacío).

Mientras más lámparas mejor

Trabajaremos a modo de reemplazo o con lo que conoce como reparación de fallas cruzadas; por ello debes tener o buscar todo el material que puedas para trabajar. Intenta que tus dos lámparas iniciales tengan problemas diferentes para que puedas obtener al menos una funcional.

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Ahora, lo primero, evidentemente, es determinar qué parte está dañada. Para ello necesitas realizar una medición efectiva. ¿Cómo?

El primer paso es buscar las herramientas. Para proceder necesitarás: un destornillador de pala y un multímetro. Luego también deberás tener un pequeño alicate para que te ayude con los filamentos.

Ahora desarmemos las lámparas. Toma el destornillador y colócalo en forma perpendicular contra la base del bombillo. Esta tiene una pequeña línea alrededor ¿la ves? Allí debes aplicar presión, apalancando suavemente hasta que logres separar el vacío.

Ojo, no tienes que separar completamente la lámpara; una vez las partes de la lámpara estén sueltas podrás ver los filamentos sin problemas. ¿Los observas? Parecen pequeños tubos en uno de los costados. Desde esta posición puedes hacer la medición tranquilamente.

Busca un multímetro, pues lo principal es medir la continuidad sobre el vacío, siendo esta la más fácil de medir para efectos prácticos (para no complicar la situación para las personas que no poseen experiencia).

¿Cómo probarlo? Enciende tu milímetro y acércate a la lámpara. Cada vacío tiene dos pares de filamentos, es decir, dos resistencias separadas o dos juegos de dos filamentos. Ya con el tester o multímetro encendido pasaremos a probar la continuidad (esa configuración existe en cada tester, revisa el tuyo y elige la opción adecuada). Coloca cada terminación del tester en un filamento separado; si este suena o te da lectura de números implica que está bueno, pero para decir que el vacío funciona, debe dar lectura en ambos pares de filamentos.

NOTA: Si el vacío funciona, obviamente es la parte electrónica la que fallo, por ello puedes descartar la segunda y probar el vacío en la segunda lámpara. Si esta no funciona, allí ya habrás encontrado una parte electrónica con la cual trabajar.

Luego de hacer la medición y tengas a la mano un vacío y una parte electrónica funcional FELICITACIONES, ya podrás hacer una reparación de una falla cruzada.

Separa el filamento: ahora que ya tienes identificadas las partes tienes que separarlas para poder trabajar. Para ello toma tu alicate y comienza a desenrollar los filamentos (tan solo dale vueltas hasta que esté totalmente separado).

Una vez separadas las partes, puedes volver a probar los filamentos e incluso apoyarte en cables banana o caimán para simular la conexión total y así asegurarte de la funcionalidad de la lámpara antes de terminar el trabajo.

Ahora haz el proceso inverso: enrolla cada filamento en el pequeño tubo en el que corresponde y ajusta para dar por terminada tu reparación.

¡Reparación de falla cruzada completada!

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